Israel enfrenta una presión internacional creciente, incluso de sus aliados, mientras sigue expandiendo su operación militar en Gaza. Kaja Kallas, principal diplomática de la Unión Europea, anunció que el bloque revisará el pacto que regula sus relaciones políticas y económicas con Israel debido a la grave situación en Gaza. La revisión, apoyada por 17 de los 27 miembros de la UE, se enfocará en evaluar si Israel cumple con la cláusula de derechos humanos del acuerdo. 

El 20 de mayo, Reino Unido suspendió las negociaciones de libre comercio con Israel y convocó a su embajador. Además, Reino Unido, Francia y Canadá emitieron el día 19 una declaración conjunta condenando las acciones de Israel y advirtieron que tomarán medidas si no detiene su operación militar en Gaza y levanta las restricciones a la ayuda humanitaria para los palestinos.

"Quiero dejar constancia hoy de nuestra profunda consternación por la escalada de Israel. Reiteramos que el alto al fuego es la única vía para liberar a los rehenes. También reafirmamos nuestra oposición a los asentamientos en Cisjordania y exigimos un aumento masivo de la ayuda humanitaria para Gaza. El reciente anuncio de que Israel permitirá solo una cantidad mínima de alimentos en Gaza resulta totalmente insuficiente. Por ello, debemos coordinar nuestra respuesta, ya que esta guerra ha durado demasiado. No podemos permitir que el pueblo de Gaza muera de hambre", manifestó Keir Starmer, primer ministro de Reino Unido.