China ha presentado una nueva directriz para profundizar en la asignación de recursos y factores ambientales a través del mercado, en el marco de su transición hacia un modelo de desarrollo más verde y sostenible.

El documento, emitido por la Oficina General del Comité Central del PCCh y la Oficina General del Consejo de Estado de China, propone mejorar los sistemas de comercio de derechos de emisión de carbono, uso del agua y descarga de contaminantes, al tiempo que busca ampliar los elementos negociables y fortalecer los mecanismos de formación de precios.
Para 2027, el país aspira a contar con un sistema de comercio ambiental más dinámico, transparente y respaldado por mecanismos de ahorro energético basados en el mercado.
Pese a las limitaciones de recursos y la presión ambiental, China ha avanzado en la implementación de soluciones de mercado como el mercado nacional de carbono, plataformas para la reducción voluntaria de emisiones y esquemas piloto de comercio de agua y otros recursos.
Según la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma del país, estas reformas están diseñadas para canalizar los recursos hacia sectores verdes y de baja emisión, apoyando la transformación económica y el surgimiento de nuevas fuerzas productivas de calidad.
Con esta medida, China no solo busca responder a sus propios desafíos ambientales, sino también ofrecer una vía alternativa de desarrollo sostenible que prioriza la innovación institucional y el equilibrio ecológico.