China y los 5 países de Asia Central firmaron el 17 de junio la Declaración de Astaná.

Han afirmado entenderse mutuamente, respetarse y apoyarse en cuestiones relativas a los intereses fundamentales de cada país. Defenderán firmemente el papel fundamental y crítico de las Naciones Unidas en el mantenimiento de la paz, la seguridad y el desarrollo sostenible internacional. Estos países valoran enormemente la iniciativa de la Franja y la Ruta y seguirán reforzando la alineación estratégica entre esta iniciativa y las estrategias de desarrollo de Asia Central. Las partes también se han comprometido a consolidar el sistema multilateral de comercio basado en las normas de la Organización Mundial del Comercio, a apoyar la modernización de las normativas comerciales internacionales para adaptarse a los tiempos actuales y a promover la liberalización y la facilitación del comercio y la inversión. Las seis naciones también han acordado seguir aprovechando el potencial de la cooperación agrícola y a ampliar su colaboración en sectores como la energía, los recursos minerales, los intercambios culturales y el turismo.

Asimismo, han designado a China como sede de la 3ª Cumbre China-Asia Central en 2027.