Chengdu, capital de la provincia suroccidental china de Sichuan, se ha consolidado como un atractivo centro de inversión y talento internacional, gracias a su rica herencia cultural, ubicación estratégica y políticas favorables al emprendimiento. Hoy, más de 4.000 empresas con inversión extranjera operan en la ciudad, donde también residen más de 100.000 ciudadanos extranjeros.

La historia del neerlandés Norbert Antosik y su empresa eChinaCareers ilustra este fenómeno. Tras visitar Chengdu en 2013, Antosik y su esposa decidieron mudarse en 2015, atraídos por la armonía entre tradición y modernidad. De acuerdo con Antosik, en Chengdu uno puede disfrutar desde la ópera de Sichuan hasta ferias tecnológicas y todo en un ambiente relajado.
Su empresa, fundada en 2016, se especializa en conectar profesionales extranjeros con oportunidades laborales en China. Desde entonces, ha prosperado dentro de zonas industriales dedicadas al talento internacional, beneficiándose de incentivos como alquiler subsidiado.
Empresas como la australiana Cochlear también han apostado por Chengdu. En 2021, la compañía inauguró su única planta internacional de implantes cocleares en Tianfu New Area, con una inversión de 87 millones de dólares. El gerente general para China de Cochlear, Li Xinyu, destaca el sistema logístico de Chengdu y el apoyo gubernamental como claves para el establecimiento de la compañía en Chengdu.
Según datos recientes, Chengdu lidera el suroeste chino en inversión extranjera directa y atracción de turistas internacionales, consolidándose como un nodo clave de la iniciativa de la Franja y la Ruta.
La ciudad no solo ofrece infraestructura moderna, sino también un ecosistema inclusivo para la innovación y el emprendimiento global.