Con el objetivo de proteger mejor a su creciente población envejecida, China ha emitido un plan nacional de respuesta ante emergencias en centros de atención para personas mayores.

El nuevo plan busca mejorar los mecanismos de actuación frente a crisis imprevistas, estandarizar los procedimientos de respuesta y fortalecer la capacidad tanto de las autoridades civiles como de las instituciones geriátricas para gestionar situaciones de emergencia.
La medida responde a un contexto demográfico cada vez más desafiante. A finales de 2024, China contaba con más de 310 millones de personas mayores de 60 años, lo que representa el 22 % de su población total.
El plan contempla un amplio abanico de escenarios potenciales, desde desastres naturales y accidentes hasta emergencias sanitarias o alteraciones del orden público. Establece protocolos específicos para clasificar las emergencias, activar los sistemas de respuesta y ejecutar operaciones de rescate y recuperación.
También se incluyen lineamientos para el apoyo posterior a las crisis, investigaciones, campañas de educación pública y la realización periódica de simulacros y capacitaciones, con el fin de garantizar la preparación integral del personal y de las instituciones.
Con esta iniciativa, China no solo responde a los riesgos asociados con el envejecimiento de su población, sino que también reafirma su compromiso con un sistema de bienestar moderno, resiliente y centrado en la dignidad y seguridad de sus ciudadanos mayores.