Las fuertes lluvias siguen azotando el norte de China. En esta ocasión, la provincia de Hebei y la ciudad de Beijing se llevan la peor parte de las tormentas.

En el condado de Fuping, en la provincia de Hebei, han caído 540 milímetros de lluvia entre el viernes y el sábado, una cifra récord, que provocó inundaciones en cinco pueblos y obligó a evacuar a más de 4.600 personas. Cerca de allí, en el condado de Yixian, 182 pueblos se inundaron, desplazando a más de mil 600 residentes.

Las conexiones eléctricas y de transporte se están restableciendo gradualmente.

En el distrito de Miyun, en Beijing, las lluvias torrenciales han provocado inundaciones repentinas y corrimientos de tierra, cortando carreteras y comunicaciones.

Los servicios de emergencia están trabajando para rescatar a los residentes atrapados y reparar las infraestructuras dañadas.

Las tormentas también han afectado a las provincias de Gansu, Shaanxi y Mongolia Interior. 

Aunque se prevén más lluvias, se espera que su intensidad disminuya.

Las autoridades prosiguen en sus esfuerzos de respuesta de emergencia.