Un entorno con baja temperatura, sin luz y alta presión, en teoría debería ser un lugar sin vida. Sin embargo, la realidad es todo lo contrario. Aquí viven miles de especies raras, gran cantidad de microorganismos en aguas profundas. Muchas de sus peculiares cualidades tal vez cambiarán la vida del ser humano en el futuro. En las aguas profundas, se esconden grandes recursos desconocidos para el ser humano.
En 2001, la Asociación de Oceanografía comenzó el estudio sobre los recursos genéticos de los animales marinos. En una década, incrementó la cantidad recolectada de recursos marítimos. Con la mejora de los equipos de exploración marítima y el reforzamiento de la capacidad exploradora en aguas profundas, los trabajadores marítimos aceleran sus pasos para conocerlas e investigarlas. Sin duda, encontrarán otros secretos en las aguas profundas.