Brillando bajo el sol de las zonas montañosas, los tejados dorados del Palacio de Potala reafirman su esplendor tras la restauración. Como piezas claves de la centenaria estructura, los tejados también reflejan las asociaciones históricas de la región con sus alrededores.

Los tejados dorados están cubiertos con bronce y bañados en oro de alta pureza. Sus elementos decorativos combinan las características de diversas culturas: la tibetana, la de la etnia Han, la mongola y la de culturas sudasiáticas. Tanto las estatuas como la caligrafía presente en las escrituras dan testimonio de una cultura abierta y diversa.

La reciente restauración comenzó a principios de 2018.

La reciente restauración comenzó a principios de 2018, con fondos del gobierno central de China, reservados especialmente para este fin. Se han consumado más de 75 kilogramos de oro y 320 kilogramos de mercurio.

El Palacio de Potala se construyó originalmente durante la dinastía Tang, hace más de trece siglos. A mediados del siglo XVII, fue ampliado hasta alcanzar sus dimensiones actuales.

El Palacio de Potala se construyó originalmente durante la dinastía Tang.

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