Como luchador comunista y líder de China Jiang Zemin vivió comprometido con los ideales comunistas y con el bienestar del pueblo chino. El Grupo de Medios de China hace un repaso a la vida del expresidente de China Jiang Zemin.
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Jiang Zemin fue un líder destacado, que gozó de un gran prestigio en todo el Partido Comunista de China, el Ejército en su conjunto y el pueblo de todos los grupos étnicos de China. Fue un ferviente defensor del marxismo, un destacado revolucionario proletario, un estratega militar y un diplomático. Fue, además, un luchador comunista de larga trayectoria y un destacado líder del socialismo con peculiaridades chinas. Fue el núcleo de la tercera generación del liderazgo central colectivo y el importante pensamiento de la triple representatividad.
Jiang nació el 17 de agosto de 1926 en la ciudad de Yangzhou, en la provincia de Jiangsu, en una familia de académicos que otorgaba un gran valor al patriotismo. En 1943, Jiang cursó estudios superiores en una universidad de Nanjing. Participó activamente en los movimientos progresistas de estudiantes patriotas en resistencia contra la agresión japonesa. En abril de 1946 Jiang se unió al Partido Comunista de China, convirtiéndose, así, en un luchador comunista.
En 1954, China necesitaba un gran número de cuadros técnicos y de gestión para la construcción de la Primera Fábrica de Automóviles de Changchun. Jiang fue asignado a la planta. En 1955, fue a la Stalin Automobile Works en Moscú, donde trabajó como aprendiz. Al regresar a China en mayo de 1956, recuperó su puesto en la Primera Fábrica de Automóviles de Changchun.
En 1980, ejerció como vicepresidente de la Comisión de la Administración Estatal sobre Asuntos de Importación y Exportación y de la Comisión de la Administración Estatal sobre Inversión Extranjera. Durante sus funciones, fue pionero en políticas especiales y medidas flexibles en las provincias de Guangdong y Fujian y dirigió zonas económicas especiales.
En mayo de 1982, Jiang Zemin fue nombrado primer viceministro de Industria Electrónica de China, y en 1983, se convirtió en ministro de Industria Electrónica de China. En septiembre de 1982, Jiang Zemin fue elegido miembro del Comité Central del Partido Comunista de China en el duodécimo Congreso Nacional del PCCh.
En 1985, Jiang se desempeñó como alcalde de Shanghai, y en 1987 fue nombrado secretario del Comité Municipal del PCCh de Shanghai. Apoyó activamente el desarrollo y la apertura de Pudong, con énfasis en la necesidad de convertir el distrito en una zona urbana nueva, moderna y de categoría internacional. En noviembre de 1987, Jiang Zemin fue elegido miembro del Buró Político del Comité Central del PCCh.
A finales de la primavera y principios del verano de 1989, tuvo lugar en China un grave disturbio político. Jiang respaldó e implementó la correcta decisión del Comité Central del PCCh de tomar una posición clara contra la agitación, defender el poder estatal socialista de China y proteger los intereses fundamentales del pueblo.
En junio de 1989, Jiang Zemin fue elegido miembro del Comité Permanente del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China y secretario general del Comité Central del Partido Comunista de China. En marzo de 1990, Jiang Zemin se convirtió en presidente de la Comisión Militar Central de la República Popular China. En marzo de 1993, Jiang fue elegido presidente de la República Popular China y presidente de la Comisión Militar Central de la República Popular China.
En noviembre de 2002, Jiang Zemin estableció la meta de construir una sociedad modestamente acomodada en todos los aspectos y elaboró los requisitos fundamentales de la implementación completa del importante pensamiento de la triple representatividad.
Jiang Zemin sugirió que las primeras dos décadas del siglo XXI debía tener lugar la fase de desarrollo de la construcción de una sociedad modestamente acomodada en todos los aspectos. Esta fase es un componente vital para China a la hora de completar el paso definitivo de su estrategia de desarrollo en tres pasos para la modernización. También es una fase clave para la mejora del sistema de economía de mercado socialista y una mayor apertura al mundo.
Describió los recursos humanos como primordiales y urgió a los Comités del PCCh y a los Gobiernos de todos los niveles del país a trabajar duro para cultivar, atraer y hacer un bueno uso del talento.
Jiang le confirió una gran importancia al papel clave que desempeñan la ciencia y la tecnología en el desarrollo de las fuerzas productivas sociales. Propuso promover con vigor el conocimiento y la innovación científica y tecnológica y construir un sistema nacional de innovación del conocimiento, con el fin de impulsar las capacidades de autoinnovación de China y alcanzar el desarrollo tecnológico.
Jiang Zemin impulsó el fundamento teórico de la reforma socialista de China. En la década de 1990, estableció los objetivos de la reforma y el marco básico de la economía de mercado socialista, y creó la nueva realidad de la reforma y apertura de China en todos los aspectos.
En junio de 1992, decidió que China debía llevar a cabo una reforma fundamental de su economía altamente centralizada y planificada, debido a que, de lo contrario, sería imposible alcanzar la modernización. Ese mismo año, el décimo cuarto Congreso Nacional del Partido Comunista de China formalizó el establecimiento de la economía de mercado socialista como la meta de la reforma económica de China. A finales del siglo XX, China estableció el marco básico de la economía de mercado socialista.
En la década de 1990, Jiang Zemin comprendió con firmeza la tendencia a la aceleración de la globalización económica y enfatizó que China debía abrirse al mundo. Según Jiang, China debía fortalecer los intercambios y la cooperación con otros países en materia de comercio, ciencia y tecnología y cultura, así como absorber y aprender de todos los logros avanzados para prosperar y fortalecerse.
Jiang Zemin expuso los principios para la adhesión de China a la Organización Mundial del Comercio, haciendo que China tomara la iniciativa en todo el proceso de negociación de su adhesión. De esta forma, China se convirtió formalmente en miembro de la OMC en diciembre de 2001. Jiang subrayó que el desarrollo y el progreso de China son inseparables de los frutos de las civilizaciones de todos los países.
Respecto a la construcción de una economía socialista con peculiaridades chinas, Jiang propuso la transformación del modelo de crecimiento económico de extensivo a intensivo para mantener el crecimiento económico a un ritmo rápido y sostenible.
En opinión de Jiang Zemin, China debía adherirse y mejorar el sistema democrático socialista. Pidió que el pueblo ejerciera elecciones democráticas, así como la toma de decisiones, la gestión y la supervisión democráticas. Además, quería que el pueblo disfrutara de una amplia gama de derechos y libertades, y que el país respetara y protegiera los derechos humanos en concordancia con la ley.
En materia religiosa, Jiang señaló que las políticas del Partido respecto a libertad de culto debían implementarse en su totalidad y que los asuntos religiosos del país debían ser gestionados por la ley. Propuso que el país aplicara el imperio de la ley y reforzara el sistema jurídico socialista.
Jiang describió la construcción cultural como una fuerza importante a la hora de unir y motivar al pueblo de todos los grupos étnicos del país y como un símbolo importante de la fortaleza nacional integral.
Hong Kong regresó con éxito a la patria el 1 de julio de 1997, y Macao, el 20 de diciembre de 1999. Esas fechas, Jiang viajó a Hong Kong y a Macao y fue testigo de las ceremonias de retorno. Enfatizó que el principio de un país, dos sistemas debe implementarse total y correctamente bajo todas las circunstancias. Con el firme apoyo del Gobierno central, los Gobiernos de las dos Regiones Administrativas Especiales de Hong Kong y Macao respondieron con habilidad a la crisis financiera asiática.
Jiang comprendió la situación general de la resolución de la cuestión de Taiwan, y trabajó para que las dos partes del estrecho de Taiwan alcanzaran el Consenso de 1992, que encarna el principio de una sola China y hace avanzar las consultas y negociaciones a través del Estrecho.
Frente a los altibajos de la escena internacional, Jiang tenía una profunda visión de las tendencias mundiales. Señaló que la paz y el desarrollo mundiales son fundamentales.
Reiteró que China considera fortalecer la solidaridad y la cooperación con los países en desarrollo como el principio básico de su política exterior. En ese sentido, llamó a realizar esfuerzos activos para avanzar hacia la multipolaridad, promover la democracia en las relaciones internacionales, respetar la diversidad del mundo e impulsar los intercambios y el aprendizaje mutuo entre las civilizaciones.
Jiang Zemin prestó suma atención a la autoconstrucción del Partido Comunista de China. Urgió a los funcionarios a llevar a cabo más acciones para beneficiar al pueblo, a tener siempre en mente la seguridad del pueblo, a preocuparse por las dificultades que atraviesa el pueblo y a esforzarse por realizar acciones prácticas y buenas para el pueblo.
Cuando Jiang tomó las riendas del Partido y del país, el socialismo mundial se enfrentaba a pruebas críticas. Bajo su liderazgo, China superó las dificultades y los riesgos surgidos en los ámbitos político, económico y medioambiental, y en particular afrontó con éxito el impacto de la crisis financiera asiática. Bajo su mano firme, China luchó con éxito contra las graves inundaciones de 1998.
En marzo de 2005, la Asamblea Popular Nacional de China adoptó la decisión de aceptar la dimisión de Jiang Zemin como presidente de la Comisión Militar Central de la República Popular China. Tras retirarse de su puesto de liderazgo, apoyó firmemente la labor del Comité Central del PCCh, se preocupó por la gran causa del socialismo con peculiaridades chinas y respaldó la lucha del Partido contra la corrupción.
La triple representatividad ideada por Jiang reflejó las nuevas exigencias del Partido y del Estado debido a los cambios y al desarrollo de China y del mundo contemporáneo. Esta es la riqueza espiritual del Partido y del pueblo.