El envejecimiento de la población, la baja natalidad y el crecimiento negativo de la población son temas recurrentes en China. Al tiempo que los legisladores del país se reúnen en Beijing con el fin de debatir medidas para hacer frente al desequilibrio demográfico, CGTN habló con una experta en demografía del máximo órgano de asesoramiento político para saber más al respecto.
01:58
Wu Ruijun, miembro del XIV Comité Nacional de la CCPPCh, opinó que los responsables políticos deberían plantearse ajustar al menos estos tres aspectos en relación con los drásticos cambios demográficos de China.
En primer lugar, están experimentando un crecimiento negativo de la población impulsado por cuestiones de fertilidad, lo que significa que deben trabajar en una política integral que apoye el matrimonio, la natalidad, la maternidad y la paternidad, y la educación. La política actual se centra más en la fertilidad y carece de un pensamiento sistemático. Si China quiere mejorar los niveles de fertilidad, necesita ayudar a los jóvenes con el matrimonio y la crianza de los hijos. Cómo aumentar su disposición a tener hijos, cómo reducir su carga y capacitarlos para que sientan una menor ansiedad sobre la educación de sus hijos en términos de recursos y costes.
En segundo lugar, deberían aumentar la inversión en capital humano, porque el crecimiento demográfico negativo y la disminución de la población han ensombrecido el dividendo demográfico. Dada la llegada de la digitalización y la inteligencia artificial, necesitan dotar a la transformación de las estructuras económicas e industriales con una población cualificada, elevando la productividad total de los factores. Así pues, las maneras de aumentar la inversión en educación para lograr un desarrollo equilibrado en las regiones y aumentar el nivel educativo, serán cuestiones importantes en cuanto a un desarrollo económico de alta calidad y basado en el talento.

China tiene ahora una proporción aún mayor de adultos mayores, lo que ejerce una creciente presión sobre la seguridad social.
El tercer aspecto sería hacer frente al envejecimiento de la población. China tiene ahora una proporción aún mayor de adultos mayores, lo que ejerce una creciente presión sobre la seguridad social.
Así pues, la experta propuso acelerar la construcción propuesta de un sistema de pensiones basado en tres pilares. El primer pilar es la pensión básica, luego la renta empresarial subvencionada, y el último es la pensión personal. Deben hacer más grande y sólido el primero, y ampliar los otros dos. Mientras tanto, deben desarrollar la industria de servicios inteligentes de atención a la tercera edad para mejorar la calidad de vida de la población de edad avanzada y garantizar que sus años crepusculares sean felices.