El fuerte terremoto que sacudió el centro de Myanmar el 28 de marzo ha dejado una estela de destrucción, con graves pérdidas humanas y materiales. Imágenes satelitales publicadas por Reuters el 30 de marzo muestran el antes y el después de varias zonas afectadas, evidenciando el colapso de numerosos edificios y daños en infraestructuras clave. Uno de los daños más significativos ocurrió en la histórica Ava Bridge, un ícono sobre el río Irawadi con más de 90 años de antigüedad, que sufrió un colapso parcial.
En respuesta a la tragedia, el Centro de Aplicaciones de Satélites de Recursos de China desplegó 14 satélites, incluidos los de la serie Gaofen y el satélite de reducción de desastres HJ-2 05, para monitorear la zona afectada y proporcionar datos clave para las labores de rescate. El impacto del sismo resalta la vulnerabilidad de la región y la urgencia de medidas para fortalecer la infraestructura ante futuros desastres.