En una carrera de alto riesgo en pos de tecnologías de nueva generación, las startups chinas especializadas en inteligencia artificial, conducción autónoma y fabricación avanzada, están ganando impulso gracias a un modelo de financiación novedoso pero solidario denominado "jungla de fondos".

Este ecosistema, una tupida red de fondos de inversión públicos, capital de riesgo y apoyo empresarial, está acelerando el surgimiento de las llamadas empresas "gacela", "unicornio" y "pequeño gigante" en toda la provincia de Anhui, en el este de China, y más allá.

Un gran ejemplo es HiDream.ai, que en solo dos años se situó a la cabeza de las startups mundiales de IA generativa. Con su tecnología de generación de videos de calidad cinematográfica, esta empresa de rápido crecimiento ha atraído a 10 millones de usuarios particulares y 40.000 clientes corporativos en todo el mundo. 

Su fundador, Mei Tao, afirma que crear una empresa de inteligencia artificial es como "aventurarse en un territorio desconocido" en el que tanto la tecnología como el mercado son completamente nuevos.

En medio de una dinámica internacional cambiante que provocó la retirada de capital estadounidense y una relativa escasez de financiación de riesgo en RMB, la empresa adoptó una estrategia de "avanzar rápido con pequeños pasos" demostrando su valor con capital limitado para atraer inversiones de seguimiento. El cambio de rumbo se produjo el año pasado, cuando se aseguró una importante ronda de Serie A, en la que la empresa estatal Hefei Industry Investment Group fue el principal inversor, junto con el fondo de fondos de inteligencia artificial de Anhui y otros inversores institucionales.

Más allá de la financiación, el establecimiento de su base en Hefei, capital provincial de Anhui, ha ayudado a la empresa a ampliar sus aplicaciones en radiodifusión, cine y televisión, y turismo, al tiempo que el gobierno local busca aprovechar las tecnologías de IA para potenciar las industrias locales.

HiDream.ai tenía buenas razones para elegir Hefei como sede. La provincia de Anhui ha establecido planes para cultivar una cohorte de empresas gacela de rápido crecimiento y una nueva oleada de unicornios, startups valoradas en más de mil millones de dólares estadounidenses. La provincia también se ha comprometido a apoyar a las empresas locales "pequeños gigantes", que son pequeñas y medianas empresas especializadas que destacan en nichos de mercado, impulsan la innovación, abordan tecnologías de vanguardia y ayudan a fortalecer las cadenas industriales.

Para potenciar estas empresas "bestia fantástica", Anhui ha construido una "jungla de fondos" liderada por inversores estatales y a la que se ha sumado el capital social. La agrupación de fondos pretende garantizar financiación suficiente para una empresa tecnológica en todas las fases de su crecimiento.

Hasta el pasado octubre, se habían creado en el complejo de fondos un total de 124 fondos con casi 50.000 millones de yuanes (unos 7.000 millones de dólares) de capital comprometido, que invierten en más de 400 proyectos. La provincia alberga 2.191 fondos privados, incluidos 50 fondos ángel, 734 fondos de capital riesgo y 1.407 fondos de inversión industrial. 

"Los distintos sectores y las diferentes fases de crecimiento tienen necesidades de capital distintas. Una 'jungla de fondos' ofrece fondos especializados para cada fase, formando así una matriz integral que nutre a una industria a lo largo de todo su ciclo de vida", explicó Tang Zhiqiang, vicedecano del Instituto de Industria y Tecnología de la Información de Anhui.

"Este exuberante ecosistema de fondos impulsa el crecimiento de las empresas a través de una potenciación financiera a medida", añadió.

Asimismo, los empresarios de las industrias emergentes de Anhui comparten la convicción de que hay que centrarse en la investigación y desarrollo. "La I+D no debe detenerse nunca", subrayó Mei Tao, y añadió que HiDream.ai integra continuamente los comentarios de los usuarios para perfeccionar sus modelos a diario.

"La IA exige grandes talentos y mucha financiación. Un ecosistema financiero sano impulsa la innovación y ayuda a más pioneros tecnológicos a abrirse camino", afirmó Mei.