Ciudades de toda China han empezado a llevar a cabo pruebas masivas y a imponer nuevas restricciones a los viajes con el fin de contener el mayor brote de COVID-19 en meses.

Ciudades de toda China han empezado a llevar a cabo pruebas masivas.
Zhangjiajie, una popular ciudad turística en la provincia de Hunan, exige a todos los turistas tres pruebas de COVID-19 antes de abandonar la ciudad. Las autoridades locales también buscan de forma urgente a 777 turistas que estuvieron en contacto estrecho con un paciente confirmado.
La ciudad de Guangzhou, en el sur de China, advierte a sus residentes de que deben evitar cualquier viaje innecesario.
Beijing, por su parte, está realizando pruebas masivas en los distritos que han registrado nuevos casos. Las autoridades también han pedido a todos los estudiantes que salieron de la capital china que vuelvan dos semanas antes de reanudar las clases, con el fin de poder realizar la debida cuarentena.