La policía irlandesa confirmó el 8 de octubre la muerte de 10 personas, entre ellas una niña en edad escolar, tras una explosión en una gasolinera en Donegal, Irlanda.

La explosión, descrita por la policía como un "extraño accidente", causó daños generalizados, incluso en los edificios y coches circundantes, según informan los medios de comunicación. Las labores de búsqueda y rescate continúan, pero la policía ha declarado que no espera que haya más víctimas. La causa sigue siendo desconocida y aún no se ha anunciado el inicio de una investigación mientras se sigue buscando entre los escombros.