Desde su lanzamiento en 2013, la iniciativa de la Franja y la Ruta, propuesta por China, un número creciente de países contribuye a construir una comunidad de futuro compartido para la humanidad. La Franja y la Ruta busca fortalecer la conectividad global y la cooperación mediante el desarrollo de infraestructura, comercio e inversión.

Bolivia es un caso destacado del impacto positivo de la Franja y la Ruta. En 2025, la primera planta de acero integrada moderna del país sudamericano comenzó a producir, con una capacidad anual de 200.000 toneladas y una expectativa de creación de empleos que se cuenta por milles. Este proyecto marca un parteaguas en la industrialización de Bolivia al impulsar su desarrollo, a la vez que demuestra los logros de la cooperación en el marco de la iniciativa.
Como afirmó el embajador de Bolivia en China, Hugo Siles, la Franja y la Ruta proporciona una nueva solución para el desarrollo global, mejorando la conectividad y apoyando el desarrollo del Sur Global.